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Los años sabáticos se están volviendo cada vez más populares para los estudiantes que desean experimentar el mundo real o tomarse un tiempo para viajar antes de embarcarse en sus próximos pasos. Los números de estudiantes que toman años sabáticos cada vez siguen aumentando. El desarrollo personal, la exploración y la toma de decisiones son algunas de las grandes motivaciones para aquellos que están considerando un año sabático. Hoy en día tenemos muchas opciones y posibilidades para este tipo de viajes, por ende, antes de embarcarte debes planificar de manera efectiva y considerar los siguientes puntos antes de tomar un año sabático:
1. ¿Cuánto tiempo durará tu viaje exactamente?
En primer lugar, planifica cuánto tiempo quieres que dure tu aventura. Un año sabático no necesariamente tiene que ser un año completo. Puedes encontrar muchos programas entre cortos e intensivos, por ejemplo, los programas de inmersión de verano, o incluso 12 semanas de prácticas voluntarias. Es una decisión que debes tomar teniendo en cuenta dos cosas: ¿cuánto tiempo quieres viajar y cuánto tiempo puedes permitirte viajar? Reflexiona acerca de tus estudios, limitaciones de tiempo, tu presupuesto y tus planes futuros, y planifica en consecuencia.
2. ¿A dónde vas a viajar?
Hay tantos destinos a los que viajar que la elección puede ser muy difícil. Antes de tu año sabático, considera tus preferencias personales, dónde podrías encontrar las oportunidades que necesitas, y por supuesto, tu presupuesto. ¡No hay que olvidar el presupuesto! Las nuevas ciudades y culturas son siempre muy divertidas, ya que presentan grandes oportunidades de aprendizaje y crecimiento, además de abrirte los ojos a una nueva parte del mundo.
Otras cosas para considerar con respecto a tu destino de año sabático serían; ¿Cómo es el clima en la temporada en la que vas? que idioma hablan allí? ¿Es una ciudad segura para viajar solo? ¿Tienen vuelos directos desde tu ciudad a este destino? ¿Qué cultura soñarías con conocer mejor? ¿Una vez allí, quieres viajar a más destinos?
3. ¿Cuáles son tus fondos?
Es importante planificar cómo va a pagar este viaje. Si quieres trabajar durante este tiempo, ¿cómo lo puedes hacer? ¿Qué documentos necesitas para poder trabajar? Si va a utilizar tus ahorros, ¿cómo puedes elegir un destino y un programa que sean asequibles y gratificantes?
Además, ¿te interesa viajar durante tu estancia en el extranjero? Si es así, reserva algunos fondos para el turismo y otras aventuras en diferentes países o ciudades, que también pueden costar más de lo que crees si no planificas con anticipación. Ten en cuenta todos los fondos necesarios y explora tus opciones. Las becas para estudiar en el extranjero están disponibles para varios programas y seguramente también a través de tu universidad. ¡Así que antes de tu año sabático comienza a considerar y mirar todas las opciones disponibles!
4. ¿Cuál es tu razón para hacer un año sabático?
Probablemente la pregunta más importante que deberías hacerte es ¿por qué tomaste la decisión de hacer este año sabático? Hay una gran cantidad de programas entre los que puedes elegir para que tu tiempo en el extranjero valga la pena. ¿Quieres avanzar en tu carrera profesional? Si es así, una pasantía en el extranjero es una gran idea. ¿O te gustaría aprender sobre un nuevo idioma y cultura? Si es así, entonces un programa de inmersión cultural sería perfecto. ¿Quizás quieras hacer algo bueno por el mundo? Hay tantas oportunidades de voluntariado que pueden permitirte hacer esto. O incluso puede que desees combinar todos estos factores, ¡también es una opción!
Programas recomendados de Euroace: Año sabático personalizado en Valencia
Un año sabático no es solo turismo, es mucho más allá. En este tiempo sacarás aprendizajes que los llevarás contigo siempre. Es por eso por lo que es importante considerar todos estos puntos antes de subirte al avión en rumbo a tu año sabático. Explora todas las posibilidades y elabora tu propio plan, para que sientas que está obteniendo de esta experiencia lo que realmente deseas y cada momento valga la pena.
